La primera mención de la Gran Nube de Magallanes de la que se ha hecho mención fue realizada por el astrónomo persa ‘Abd al-Rahman al-Sufi Shirazi, quien tiempo después fue conocido en Europa como Azophi, en su Libro de estrellas fijas que publicó alrededor del año 964 d.C. La siguiente observación de la Nube de Magallanes fue registrada entre los años de 1503 y 1504 por Américo Vespucio, información que dejó plasmada en una carta que escribió sobre su tercer viaje. En esta carta menciona “tres nubes, dos brillantes y una oscura”. Con la palabra “brillante” se refiere a las dos Nubes de Magallanes, y con la palabra “oscuro” se refiere a una nebulosa de polvo que tenía la apariencia de un espacio en la vía láctea.
La Gran Nube de Magallanes es una galaxia cercana que alguna vez fue considerada como una galaxia de tipo irregular hasta que los astrónomos la estudiaron más de cerca. Puede haber sido una espiral. La Gran Nube de Magallanes es únicamente visible en los cielos del hemisferio sur de la Tierra, junto con su galaxia enana conocida con el nombre de la Pequeña Nube de Magallanes. La Vía Láctea se encuentra de forma constante consumiendo gas que fluye de las nubes de Magallanes por medio de la Corriente de Magallanes. Finalmente, estas dos galaxias más pequeñas podrían colisionar con la Vía Láctea.
Es una galaxia enana que se encuentra cerca de la Vía Láctea que está aproximadamente a unos 200.000 años luz de distancia. Es unas 100 veces más pequeña que la Vía Láctea. Tiene aproximadamente entre 1.000 y 4.000 millones de estrellas. Es una de las galaxias más cercanas a la vía formando el Grupo Local y la Galaxia de Andrómeda.